Sumérgete en la rica historia y la cultura vibrante de Binissalem, un encantador pueblo mallorquín considerado como la “capital” de la región vinícola de la isla. Situado en el centro de Mallorca, Binissalem ofrece mucho más que solo vino. Con su antigua historia, arquitectura encantadora y exquisita gastronomía, este pintoresco pueblo es un destino imperdible para los visitantes que buscan explorar la auténtica Mallorca.
Desde la época romana, la uva ha sido un elemento fundamental en la historia de Binissalem. Este pueblo fue uno de los primeros en cultivar uvas en la isla. A pesar de los desafíos, como la plaga de filoxera, Binissalem ha mantenido viva su tradición vinícola y fue la primera área en recibir la Denominación de Origen (DO) en 1991.
¿Qué hacer en Binissalem?
El encantador casco antiguo de Binissalem alberga numerosos puntos de interés histórico. Uno de ellos es la Iglesia de Santa María Robines, un magnífico ejemplo del barroco del siglo XVIII. Además, la Plaza de la Iglesia es el lugar perfecto para sumergirse en la vida local y disfrutar del animado mercado semanal y de eventos culturales durante el verano.
En los alrededores de esta localidad encontrarás encontrarás paisajes rurales y montañosos ideales para el senderismo y el ciclismo. Los valles cercanos ofrecen rutas en bicicleta relativamente fáciles. No obstante, en la Serra de Tramuntana , declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en el año 2011, te encontrarás con vistas panorámicas espectaculares.
Binissalem es el punto de partida ideal para explorar los encantadores pueblos y las impresionantes playas de los alrededores en bicicleta. Desde el bullicioso pueblo de Inca hasta las sofisticadas ciudades de Deià y Sóller.
Una visita obligada en Binissalem es la prestigiosa Bodega José Luis Ferrer, una de las más destacadas de la isla. Aquí, los visitantes pueden disfrutar de visitas guiadas a las instalaciones, que incluyen los viñedos. Podrás visitar las bodegas de fermentación y envejecimiento, así como las catas de vino dirigidas por expertos enólogos. Durante la visita, aprenderás el proceso de elaboración del vino, desde la vendimia hasta el embotellado, y degustar una selección de los premiados vinos de la bodega.
Si tu viaje coincide en septiembre, no te pierdas el festival anual del vino, Festa des Vermar. Este emocionante evento incluye actividades como el lanzamiento de uvas, espectáculos y degustaciones de vino, que atraen tanto a turistas como a lugareños en una celebración única de la cultura vinícola de Binissalem.